· La sociedad actual glorifica la juventud y considera que lo viejo es feo, que no sirve, que se tiene que tirar. Así negamos el envejecimiento por lo que tratamos de mantenernos, al menos en apariencia, lo más jóvenes posible.
· La millonaria industria de la belleza fomenta, mediante millonarias campañas publicitarias, por todos los medios de comunicación, el culto a la apariencia juvenil y nos quiere estandarizar la belleza a ciertos tipos de hombres y mujeres. Incluso nos quiere hacer creer que mediante milagrosas operaciones o tratamientos médicos, siempre vamos a ser jóvenes y bellos.
· La anorexia abunda más, hoy en dia, porque la sociedad idealiza la imagen de la mujer de apariencia juvenil, erótica y sobretodo delgada.
· ¿Qué pasaría si hay cambios drásticos en el mundo? Los países más poderosos son africanos. Haciendo un poco de gimnasia mental, es fácil concluir, que casi todos los medios de comunicación nos mostrarían que las mujeres africanas son las más bellas del universo y que todas las demás mujeres deben seguir ese modelo. Incluso, serian populares y frecuentes las operaciones para que las mujeres blancas se vuelvan negras.
Hasta SIEMPRE.
CARLOS Tigre sin Tiempo
Yo aporto una reflexión sobre el canon de belleza.
En los tiempos de Rembrandt la mujer «ideal» era más bien entrada en carnes.
¿Qué me dicen de la «Venus Hotentote», antiguo símbolo del paroxismo de la fertildad en una mujer?
Audrey Hepburn sufrió por ser una actriz delgada entre un buen número de compañeras de curvas sinuosas. Hoy en día es probable que muchas chicas quieran parecerse a la Hepburn.
¿Y las mujeres jirafa, largos los cuellos, cubiertos con esos curiosos anillos que les confieren semejante forma?
En China, tradicionalmente las mujeres más deseadas deben tener la piel lechosa. El bronceado excesivo no es agradable; se identifica con los campesinos y con la pobreza.
¿Conclusión? El canon de belelza es, como el resto de las realidades humnanas, una construcción, un conjunto de convenciones y, como tal, un asunto absolutamente arbitrario.
En occidente hoy las mujeres «gustan» delgadas y con mucho pecho; mañana es probable que «gusten» con otro aspecto.
El negocio de la publicidad, del cine y de las industrias del sector de la belleza es, precisamente, el de generar «necesidades» en los potenciales consumidores. Si una mujer (o un hombre; también nosotros enmpezamos a ser víctimas de la «imagen ideal») está convencida de que le «falta algo» y de que ese algo le supondría, de tenerlo, «ventajas sociales», entonces hará todo lo que esté en su mano para conseguirlo: se someterá a dietas, se gastará importantes cantidades de dinero en productos de belleza, operaciones estéticas, etc. El dinero, no se olvide, es el único objetivo de una industria, sea cual fuere el producto o servicio que pretenda vender.
He visto algunos documentales en los que se insinúa (o se dice abiertamente, según el caso) que la imagen ideal y, en consecuencia, la atracción sexual, se deben a la genética; es decir, hay ciertos rasgos que nos atraen del sexo opuesto porque estamos «programados» para ello. Menuda estupidez. Esta afirmación supondría eliminar del cortejo todo lo que no fuera «innato» o «natural»; la seducción sería algo predeterminado. Se podría también utilizr el argumento siguiente: si todo ha de ser natural, si todo está «programado», ¿entones cómo es que hay personas atraídas por individuos de su mismo sexo, si entendemos que este comportamiento no es «normal» (entiéndase este adjetivo como «separado de la norma»)? ¿O cómo es que los humanos hacemos del sexo algo muy diferente a la mera actividad reproductiva de otro animales? Respuesta sencilla: el ser humano crea «cultura». Utilizamos medios anticonceptivos para evitar tener hijos si es que no los deseamos o no podemos permitírnoslos; practicamos sexo por el mero placer de practicarlo, porque nos atrae o estamos enamorados de la otra persona.
La gente también se olvida de que el amor romántco es algo que sólo los seres humanos pueden experimentar (junto a los demás sentimientos que, obvio, nos distinguen del resto de seres vivos); habrá estudios, no lo sé, de la imagen ideal; tal asunto puede «calibrarse» de forma simple: basta comprobar los rasgos físicos que se consideran como atractivos «en general» (esto último es muy importante; hablamos de «la gran mayoría», olvidándonos, y que no se malinterprete esta expresión, de las «diferentes desviaciones en los gustos») y sacar conclusiones. ¿Cómo se mide el amor? ¿Qué es lo que hace que una persona se enamore de otra? ¿Se entienden a día de hoy los mecanismos del amor romántico? Quizá algún psicólogo piense que sí…
Somos animales, por supuesto. Pero la razón nos convierte en algo superior. Tenemos instintos (el sexo, el cortejo, la necesidad de emparejarnos) que han de ser satisfechos; pero en esa satisfacción intervienen factores convencionales, esto es, humanos. Olvidarlo puede producir (de hecho ya produce) serios problemas en muchas personas que no se sienten deseadas o consideran que su aspecto físico no es el adecuado.
Intentemos evitarlo por el bien de todos.
¡Un saludo!
Gracias Tokomotxo. Esta muy bueno tu comentario.
Yo tambien te puedo contar una anecdota historica, sobretodo para aquellos hombres o mujeres que sólo buscan una «belleza juvenil perfecta».
Recuerdo hace muchos años atrás mi viejo (Mi Papá de cariño) me contaba que cuando estuvo de visita en España. Un español (creo que de las zonas campestres de madrid) le contó que había existido una mujer muy, pero muy bella, fisicamente, por dicho lugar.
Fue una joven tan bella que era la envidia de todas las mujeres y todos los hombres que la veian quedaban hipnotizados por su belleza espectacular. Los hombres que la conocian eran capaces de darle todo su dinero o bienes materiales, solo por que les hable o les de un saludo personal.
Esta bella mujer se aprovecho de esa situacion y explotó a muchos hombres, los cuales la idealizaron y pensaban que era una diosa hecha mujer y despreciaban a las demas mujeres del pueblo.
Dicen que sólo había un hombre sensato que les trataba de explicar que ella no era una buena mujer, pues les sacaba su dinero y les engañaba. Además habían otras mujeres que también eran guapas, y sobretodo eran mujeres honestas y de buen corazón; sin embargo ninguno de los hombres que andaba detrás de la bella mujer le hizo caso.
Por cosas de la vida, en pocos años, dicha mujer tuvo una pulmonia fulminante y murió; a pesar de ser una joven.
Muchos hombres se suicidaron y otros querian enterrarse con el cuerpo de la mujer. Ellos no querian que se le sepulte, ni aceptaban la muerte de la hermosa y joven mujer. Creian que era una Diosa de belleza sin par en el mundo.
Cuentan que al cabo de dos dias, bajo un calido verano, empezó a sentirse un olor nauseabundo que salia del ataud de la joven belleza, fallecida de forma imprevista.
Al tercer dia era insoportable el olor y el rostro de la bella mujer parecia de una muñeca de cera que se estaba derritiendo y comenzaba a tomar un aspecto horripilante, donde gordos gusanos empezaban a hacer sus tuneles para comer la carne que conformaba su cuerpo….
Los cientos de hombres que se acercaron a verla se sintieron tan mal que huyeron del lugar y uno de ellos, le preguntó al único hombre sensato del pueblo, quien le dijo algo así como:
Nunca adores belleza fisica sin condiciones; pues esta es temporal y al final todas, feas y bonitas terminan igual. Es mejor tener por condicion la honestidad y amor verdadero de una mujer, mas que una belleza fisica espectacular que acaba pronto y no deja nada bueno si no ha sido sincera con nosotros…
Hasta siempre.
CTsT