No es difícil comprobar que vivimos en un mundo cambiante donde “la falta de tiempo” para comunicarnos debidamente es una característica en casí todas las ciudades importantes del mundo.
Escribo entre comillas “falta de tiempo”, porque en realidad es una excusa FALSA, ya que si nos interesa algún tema o persona, siempre tenemos o nos hacemos un tiempo disponible.
Como consecuencia de esa rapidez en hacer nuestras acciones o relaciones humanas, No reflexionamos mucho en las cosas importantes de la vida o descartamos a personas valiosas que podríamos conocer mejor si nos detenemos un poco a conversar o escuchar los puntos de vistas de otras personas; aunque sea en programas culturales, técnicos o políticos por radio o la TV.
En cambio es notorio como nos dejamos influenciar por nuestras “estrellas del espectáculo” (idolos de barro la mayoria de ellos), hay gente que se la pasa prendida horas viendo los programas del espectáculo en el televisor, escuchándolo en la radio o leyéndolos en revistas.
Además, muchas de estas personas tratan de imitarlos creyendo que lo que hacen esta bien, pues relacionan, fama y dinero, como señal absoluta de éxito humano.
Si lo que buscamos es distraernos, ¿no creen que es mejor ver TV con programas más útiles?, como aprender a cocinar bien alguna comida que nos guste, o ver las novedades en la tecnología actual o como podemos economizar dinero en ciertos arreglos en casa, o como educar mejor a nuestros hijos o motivarlos a ser buenos estudiantes o deportistas, etc.
¿No creen que lo arriba expresado es mejor para nuestras vidas personales y familiares que pasando mucho tiempo viendo los chismes del espectáculo o adormeciéndonos con novelas que no dejan nada positivo en nuestras mentes?.
Dice una frase popular que nosotros “somos lo que comemos”, yo lo extendería a este caso que nosotros llenamos nuestra mente de lo que vemos o escuchamos y luego, consciente o inconscientemente, actuamos siguiendo lo visto.
Por tanto, si seguimos las modas que nos quieren vender los medios de la comunicación actualmente, entonces, seremos sus borregos para decirles amen a todo lo que ellos nos ofrezcan, y estará ausente el raciocinio de nuestra mente o usado en un mínimo porcentaje.
Incluso, mucha gente de manera estúpida o absurda, sufre por no poder seguir las modas actuales. Pocas personas, al parecer, tratan de pensar racionalmente sobre las cosas que deben seguir, comprar o hacer de acuerdo a su realidad o sus necesidades en sus vidas.
Por tanto, si realmente quieres ser feliz y vivir en paz y armonia contigo mismo y con tu familia, No sigas la moda imperante, sino sigue aquellas cosas singulares para tus necesidades o gustos, y que te hagan vivir en real armonía con las personas de tu entorno.
Hasta siempre.
CARLOS Tigre sin Tiempo
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