Ya estamos viviendo el 2021 y es bueno hacer planes para el corto (1), mediano (5) y largo plazo (10+). Ello nos ayuda a ordenar nuestras prioridades o activar nuestros suenos, sobretodo en esta circunstancia historica de la pandemia del covid-19 y todos los cambios de vida que nos ha obligado a nivel mundial. Los grandes temas que debemos tratar a fondo deberian ser:
- Desigualdad economica creciente. (corrupcion politica)
- Racismo, fanatismos religiosos y otras discriminaciones contra minorias.
- Educacion y/o salud publica al alcance de todo ser humano.
- Balance global del poder politico,economico y/o militar
- Desarrollo de la era digital (ciencia y/o tecnologia)

A continuacion quiero compartir un resumen traducido que la vision de una editorial de un diario local de New York (Long Island) tiene sobre la proxima decada en New York, USA, America y el mundo. (*)
+++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++
A medida que avanza la década, nos adentramos en una época peligrosa. La semana pasada, el consejo editorial analizó cómo pensábamos que sería el mundo en 2020, desde el punto de vista estratégico de 2010. Esta semana, miramos hacia el futuro nuevamente. ¿Qué podría ser el mundo en 2030?
Parece claro que será un mundo tallado por los desafíos de la división. La distancia entre los que tienen y los que no tienen se está ensanchando peligrosamente en Long Island (New York) y en todo el mundo:
Estamos viviendo una nueva era dorada que se volvió aún más dura durante la pandemia, ya que los trabajadores esenciales de Estados Unidos acudieron a hospitales, supermercados, precintos, aulas y depósitos de trenes o se enfrentaron a licencias y despidos. Otros, como los del sector de la hostelería, vieron cerrar toda su industria.
Mientras que algunos estadounidenses en los estratos de ingresos más altos trabajaban desde casa y tenían atención médica y ahorros, otros de diferentes niveles de ingresos vaciaron sus cuentas bancarias y esperaron en la fila para recibir alimentos donados, temiendo las facturas del hospital.
Estas disparidades se han ido expandiendo. Las filas de los habitantes de Long Island que ganan menos de $ 35,000 al año han crecido un 1.04% desde 2005, mientras que los que ganan $ 100,000 o más aumentaron un 3.31%, y aquellos en el medio se redujeron en un 4.35%, según un análisis de nextLI de datos de la Encuesta de la Comunidad Estadounidense de 2005 a 2018 que tiene en cuenta la inflación. El resultado final son más luchas para aquellos que ya están luchando, con un impacto preocupante en cómo somos educados, alojados, cuidados y alimentados. Estos son solo algunos de los desafíos que depara la próxima década.
El pecado original de Estados Unidos sigue siendo el núcleo de la nación. La muerte de George Floyd a manos de la policía de Minneapolis subrayó una vez más los desafíos incluso de la vida diaria de los afroamericanos. El racismo es un problema en Long Island, donde no ser blanco todavía puede conducir a un trato diferente por parte de la policía mientras conduce y de los agentes de bienes raíces al comprar una casa.
El arco de la historia se inclina hacia la justicia, pero lentamente. Peor aún, las pequeñas mejoras hacia una igualdad más completa se han enfrentado en los últimos años con una fuerza reaccionaria, por parte de aquellos que tienen el temor equivocado de que los estadounidenses blancos se vean amenazados de alguna manera por vecinos y ciudadanos con un color de piel diferente.
Estamos viendo los terribles impactos físicos del cambio climático, con temperaturas y niveles del mar en aumento, y tormentas más intensas. A medida que las consecuencias de un planeta que se calienta se vuelven más claras, las disparidades también serán más claras: los países más pobres sufrirán las inundaciones y el calor provocados por el uso de carbono de las naciones desarrolladas, y las naciones ricas podrán mitigar el impacto dentro de las zonas climáticas controladas de los residentes. hogares. Long Island corre un riesgo particular con sus largas costas e infraestructura subdesarrollada, desde alcantarillas hasta fuentes de agua. Lo más desafiante de todo en la próxima década puede ser la dificultad de predecir cómo se desarrollará la crisis climática, lo que provocará migraciones, escaramuzas por recursos y emergencias de salud.
El mundo fuera de nuestras fronteras es inestable, con instituciones internacionales desde la ONU hasta la OTAN, la Unión Europea y la Organización Mundial de la Salud bajo amenaza. Estados Unidos, la hegemonía rica del mundo, se ha ido retirando de su papel en el escenario mundial, dejando a los países más pobres y aliados a su suerte. Mientras tanto, antagonistas como Rusia y China están mostrando sus músculos, ansiosos por aprovechar el liderazgo estadounidense desenfocado. Las fuerzas del nacionalismo y el populismo provocadas por la desigualdad global se están agitando, con implicaciones para futuros conflictos en la guerra y la competencia económica.
En medio del confuso panorama mundial, los estados-nación no son las únicas grandes potencias. Las empresas de tecnología, desde Google hasta Facebook y Amazon, son actores mundiales, con la capacidad de destruir la competencia y burlar a los gobiernos. Gran parte de la vida moderna está respaldada por el mundo en línea, y eso seguramente continuará de manera inesperada. Pero los titanes tecnológicos indiscutidos tienen la capacidad de otorgar un enorme favor y prosperidad de manera antidemocrática. La propia idea de democracia está siendo transformada por la tecnología: la gran promesa de un mayor compromiso y una plaza pública universal se combina con el efecto de las redes sociales sin control que pueden destrozar comunidades y amenazar la civilización desde Long Island hasta Myanmar.
Estos son solo algunos de los desafíos que depara la próxima década. Si algo sabemos de mirar atrás a los viejos pronósticos, es que sin duda surgirán otros desafíos y tal vez incluso superen al resto.
++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++

En mi caso, actualmente, solo me preocupa el corto y mediano plazo. Mis metas dependen de la coyuntura nacional e internacional en que se mueve nuestro mundo; aunque en los temas que dependen exclusivamente de mi tengo la libertad de hacer lo que mas me gusta o motiva de esta vida. Lo malo es que a veces es tan breve o temporal; sin embargo las cosas buenas, la energia positiva que nos dan o producen, hacen que nos den mas motivacion para vivir. De esta manera estamos aportando con un poco de acciones buenas o buena vibracion espiritual que tanta falta le hace a este planeta tierra; para contrarrestar la maldad o violencia en todas sus variantes que vemos y/o sufrimos actualmente.
Hasta siempre
Carlos Tigre sin Tiempo (C.V.P.)